Pongamos el ejemplo de los aceites utilizados en los productos cosméticos. Hay que recordar que una crema, pomada o loción es una emulsión de agua y grasa, esto es, productos que no se mezclan pero que al emulsionar crean micro gotas de uno dentro de otro (lo mismo que una mayonesa).
De esta forma, para crear nuestra crema podemos utilizar aceites naturales o aceites minerales. Los primeros generalmente son de semillas o de frutos vegetales como almendras dulces, germen de grano de trigo, Jojoba, oliva etc… mientras que en el caso de los aceites artificiales, son destilados del petróleo como la parafina liquida o el aceite mineral.
En el caso de los aceites vegetales, la composición de las grasas se asemeja en mayor o menor medida a la secreción sebácea natural de la piel, con funciones muy claras y concretas:
En primer lugar evita la deshidratación de la piel al crear una capa grasa superficial que evita que se escape el agua,
Aportan un ambiente acido (las grasas vegetales son ácidos grasos) imprescindible para el correcto funcionamiento de los Queratinocitos (las células principales de la epidermis)
Especialmente importante es la capacidad antioxidante del sebo natural, que es imitada por los aceites naturales, ya sea por su contenido en Vitamina E como en otras moléculas antioxidantes como los polifenoles.
Existen aceites particularmente saludables para la piel, como el de Oliva por su potente acción antioxidante, o el de Jojoba, con unas excelentes propiedades como regenerante cutáneo, tal es así que en las conclusiones de algunos estudios científicos se ha propuesto su utilización como reepitelizante de primera elección en heridas leves o moderadas.
Por el contrario, los aceites minerales solo evitan la deshidratación de la piel al crear una película grasa, pero carecen por completo de acción regenerante, protectora y antioxidante. tienen la ventaja de que son mas estables en el tiempo aumentando considerablemente la fecha de caducidad del producto (no se enrancian).
Existen algunos estudios clínicos muy interesantes que comparan las diferencias entre la utilización de aceites minerales vs. vegetales para masaje en bebés prematuros sanos. Los resultados son sorprendentes, en tres estudios diferentes se demuestra que los bebés masajeados con aceites de almendras dulces tienen un mejor desarrollo neurológico y mayor ganancia de peso respecto al grupo de aceite mineral o al grupo control sin masaje. Otro estudio con aceite de coco demostró que si bien no había diferencias respecto al desarrollo neurológico, si hubo una mayor ganancia de peso respecto al aceite mineral.
En definitiva, los aceites naturales tienen la ventaja de ser mucho mas sanos y beneficiosos para la piel que los aceites minerales, mientras que estos son mucho mas baratos y estables en el tiempo.